Cuando la adversidad es una oportunidad
El pasado viernes 17 de abril, con motivo de los 40 años del Centro Agronómico de 33 y 100 años de la Fomento y como parte de los festejos, fuimos invitados a participar de una conferencia a cargo del Dr. Gustavo Zerbino, uno de los integrantes de la Sociedad de la nieve.
De izquierda a derecha Dr. Gustavo Zerbino, Presidente de la Fomento de 33 Ing Agr Guillermo Rovira y Presidente del Centro Agronómico AIA 33 Ing. Agr. Santiago Armentano
Hace 42 años un grupo de jóvenes amigos rugbistas y algunos integrantes de su familia tuvieron que vivir una experiencia que marcó su vida y la del mundo.
El Dr. Gustavo Zerbino con una humildad, humanidad, gratitud, amor y alegría contagiosa compartió con un nosotros, un grupo de 800 personas, lo que les tocó vivir y como lograron que un grupo de 16 jóvenes vivieran para contar al mundo con el ejemplo su experiencia en la adversidad.
Fuimos interrogados acerca de cuáles creemos son los motivos que hicieron que hoy estén entre nosotros. El Amor , la energía más grande que existe, por su familia, por la vida, por sus amigos, por todos nosotros, la fe en Dios, la vocación de servicio, la misión que se autoimpusieron, hizo que este grupo de jóvenes de entre 19 y 22 años se enfrentara posiblemente al mayor desafío que la vida les iba a poner por delante.
Y lo hicieron, por los que quedaron en el camino y por todos nosotros, los que con atención escuchamos lo que les tocó vivir en 73 días de su vida.
El Dr. Zerbino nos contó como nuestro sistema de creencias nos condiciona en nuestro actuar, y nos lleva a ver la realidad virtual que nosotros queremos ver. “Los ganadores tienen planes, los perdedores tienen escusas. Hay patrones de conducta que nos hacen ser problemas y en vez de ser solución. El amor como agente motivacional se enseña con el ejemplo. Somos analfabetos emocionales, nos educaron desde el deber y no sabemos distinguir nuestras emociones. Existen ladrones de energía, y esos son los que se quejan. Nos tenemos que conectar con nuestro máximo potencial y siempre agradecer. Tenemos que aceptar la realidad tal cual es: no preguntes por qué, pregunta cómo. La acción es lo único que produce resultados. Dejemos de ser individualistas y pensemos en nosotros”.
Nos desafió a que estemos permeables, abiertos a otra forma de vivir y que nuestros pensamientos y actos sean una perla que aporte a la construcción de un collar de perlas.
Gracias a Gustavo por la semilla que nos regaló y al Equipo del Centro Agronómico de 33 por darnos esta oportunidad y por pregonar con el ejemplo.